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Uno de los aspectos más importantes a la hora de plantear cómo mejorar la productividad es la luz ambiental con la que se trabaja. La luz incide de forma directa en la actividad física y neuronal del ser humano y, por ello, adecuándola correctamente a cada situación y necesidad, se podrá mejorar la eficiencia y la productividad en distintos momentos del día.
Se denomina ciclo circadiano al ciclo de actividad y reposo que experimenta el ser humano en función de la hora del día en la que se encuentra.
Esto se manifiesta de forma clara cuando, por la mañana, con la luz solar, se tiende a estar despierto. Del mismo modo, por la noche, con la ausencia de luz solar, el cuerpo se prepara para el descanso.
Estos biorritmos están condicionados por varios aspectos, aunque la luz ambiental es uno de los más importantes. Cuando la luz llega a la retina de los ojos, esta envía la señal al cerebro, que percibe el ambiente de una determinada manera y responde en consecuencia.
Hay que tener en cuenta que, con la luz de la mañana, el cuerpo humano segrega cortisol, una hormona que predispone al organismo para la actividad diaria. Por el contrario, por la noche, la hormona que se segrega es la melatonina, que predispone al sueño y al descanso.
Teniendo en cuenta estos efectos en el cuerpo humano, se puede mejorar la productividad adecuando la luz ambiental a cada situación concreta. Es decir, si se reproduce una luz ambiental que imite la luz diurna de la mañana, el cerebro responderá con mayor predisposición al trabajo y a la actividad (tanto física como mental). Por el contrario, si se opta por una atmósfera que imite la luz de media tarde o una luz tenue que se asemeje a la del atardecer, se predispondrá al cuerpo para que favorezca el sueño y el descanso.
Si se quiere saber cómo mejorar la productividad de una forma sencilla y muy efectiva, una de las opciones más recomendables es mediante el uso de luz biodinámica. La luz biodinámina es la iluminación ambiental que imita la luz natural con el objetivo de favorecer determinados biorritmos y no otros. De esta forma, usando luz biodinámica en el ambiente, se puede mejorar la productividad en ambientes de trabajo, así como favorecer un descanso más reparador en ambientes de reposo.
Respecto a cómo mejorar la productividad usando luz biodinámica, Scena es un dispositivo que permite adaptar y modificar la luz ambiental para adecuarla a las necesidades concretas de cada momento. Esto tiene aplicaciones tanto en entornos de trabajo como en las viviendas, ya que, al adaptarse a cada situación, se puede utilizar tanto en entornos activos como en entornos de reposo.
En este sentido, Scena permite adecuar tanto la intensidad como la temperatura del color de la luz (luz cálida para entornos relajados y luz fría para entornos activos). Esto permite modificar la luz ambiental de un mismo lugar para adaptarla al ciclo circadiano natural de manera acorde a cada momento del día, lo que se traduce en mayor productividad durante las horas de trabajo, y en un mayor descanso durante las horas de reposo.