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La iluminación de las oficinas es un aspecto muy importante en el entorno laboral. Porque la luz que recibimos cuando estamos trabajando afecta a nuestro estado de bienestar . Por tanto, puede repercutir negativamente en el rendimiento durante la jornada. Así que es clave elegir la luz más adecuada para cada espacio de trabajo. En este artículo hablamos de la regulación que existe al respecto, los tipos de luces que podemos instalar y algunos consejos útiles acerca del tema.

Normativa de niveles de luz en las oficinas

En primer lugar, la normativa CTE señala que los edificios deben proyectarse con el objetivo de aprovechar al máximo la luz natural . Algo de lo que se ven beneficiados los espacios de trabajo que cuentan con ventanas o grandes ventanales hacia el exterior. Además de permitir ahorrar energía , ofrece la mejor iluminación de las oficinas que se puede tener.

Pero, según recoge el , debe complementarse con una iluminación artificial cuando la natural, por sí sola, no garantice unas adecuadas condiciones de visibilidad. Entonces, recurrimos a los distintos tipos de luces que existen, teniendo en cuenta el nivel mínimo requerido de luz, según la exigencia visual del lugar.

Según la normativa , la cantidad de luz general que debe tener una oficina es de 500 lux y 0,6 de uniformidad. Aunque sus diferentes zonas tienen distintos valores que se calculan en función del confort visual, las prestaciones visuales y la seguridad. De esta forma, estos son los niveles recomendados por la norma europea en cada área.

• Zonas de paso : entre 150 y 500 lux.
• Salas de reuniones : entre 200 y 350 lux.
• Mesas de trabajo administrativo: entre 400 y 700 lux, que suben a entre 600 y 1.500 si las tareas son de diseño o dibujo.

¿Cómo debe ser la iluminación de la oficina?

Debe valorarse todo tipo de características de la luz: color, intensidad, uniformidad, regulación, tono, sombras, etc. También es importante pensar en la combinación de los diversos tipos de luces. Para así dar la uniformidad que requiere cada espacio de trabajo y sus áreas circundantes. Conocer todo esto es esencial para poder elegir la iluminación de las oficinas, que puede ser:

• Natural: debe primar la entrada de luz natural por encima de todo, tanto para ahorrar energía como para mejorar tu bienestar y rendimiento laboral. Es necesario también disponer de persianas o cortinas, ya que permiten regular la luz que entra del exterior para evitar deslumbramientos o realizar ciertas tareas.
• �����ǻ徱��á��������: una luz que adapta la temperatura de color según las horas y necesidades circunstanciales. De esta forma, se ajusta mejor a los ritmos biológicos de los trabajadores y favorece su bienestar. Da una buena visibilidad para realizar las tareas laborales.
• General: es la que proporciona una iluminación directa y uniforme a gran parte de una zona de trabajo. Se suelen colocar luces empotradas en el techo como las Simon Hole , 800, 703 y 704 o las luminarias modulares. O también el sistema de iluminación lineal Simon 860 o los tubos led perimetrales. 

• Focal: este tipo de iluminación de oficinas proporciona una luz localizada e intensa en una zona muy concreta. Es necesaria cuando realizamos trabajos detallados como el dibujo técnico, ya que de lo contrario podemos sufrir fatiga visual y cansancio. Por ejemplo, destacamos la colección de proyectores Simon 740 o Point 56. 

Automatización de la iluminación de una oficina

Además de elegir la iluminación de oficinas correcta, te recomendamos que dispongas de un sistema automatizado. Te permite controlar y programar las luces. Unas funciones que te dan una mayor comodidad en el día a día. Aparte de que ayudan a consumir menos energía y esto se traduce en mayor ahorro económico.

• �ʰ��Dz�������������ó��: gracias a los sistemas automatizados puedes programar el encendido y apagado de las luces a una hora concreta. De esta forma, nunca se quedarán encendidas durante toda la noche o el fin de semana, por ejemplo.

• ��𲵳ܱ�������ó��: poder regular la intensidad de la luz es ideal, sobre todo en la sala de reuniones, donde habitualmente puedes necesitar una más tenue para realizar una presentación de diapositivas o para la visualización de un proyector.

• Sensores de presencia: los sensores de luminosidad CLC ( Constant Light Control ) permiten detectar el movimiento de forma muy precisa. Cuando una persona se encuentra en una zona de paso, se activan automáticamente, aumentando la seguridad y el ahorro energético.

• Escenas: configurar escenas es bastante útil si necesitas una configuración lumínica específica. Con un solo clic desde tu teléfono puedes apagar y encender varias luces. O incluso controlar otros dispositivos, como las persianas.

• Control remoto: las luces inteligentes también las puedes controlar fácilmente desde tu móvil o tablet. Disponer de ellas en la iluminación de las oficinas te aporta una mayor comodidad que las luces tradicionales.

¿Cómo iluminar una oficina? Consejos

Ya sabes qué tipos de luces debes escoger para tu espacio de trabajo, teniendo en cuenta todo lo descrito. Otros consejos útiles sobre cómo iluminar una oficina son estos: 

• La instalación de las luminarias tiene que estar a la máxima altura posible.  
• Calcula bien su ubicación y usa difusores para que no se reflejen en las pantallas de los ordenadores u otros dispositivos que haya en el lugar.
• Distribuye los puntos de luz con planificación, sin que queden rincones más oscuros. Combina una iluminación de oficinas general con otra focalizada.
• Evita los excesos , ya que pueden resultar muy molestos para trabajar. La intensidad lumínica debe situarse entre 500 y 750 lux.
• Instala luces blancas (de entre 3.000 y 4.000 grados kelvin).

En definitiva, valora todo esto para conseguir una excelente iluminación de las oficinas. Te recomendamos que eches un vistazo al catálogo de productos de Simon. Encontrarás todo tipo de sistemas de luces que combinan conectividad, diseño, control y bienestar. Además, con multitud de opciones diferentes, dotadas de la última tecnología.